El Evangelio de hoy, 5 de abril, nos presenta hoy, es el desarrollo de una controversia entre Jesús y los fariseos, que viene de lejos y que se aproxima hasta acorralarle.
De algún modo parece que van en busca de Jesús, no le encontraran porque no le conocen y los criterios que utilizan en su aproximación son erróneos. Son criterios que están en diferentes planos, el mismo lenguaje es confuso y de incomprensión, “me buscareis, pero donde yo voy, vosotros no podéis venir”. Y también “vosotros sois de abajo, de este mundo; yo vengo de arriba y no soy de aquí”Se introduce tal confusión de intereses, que los mismos letrados y fariseos le interrogan. Pero, ¿Quién eres Tú?, Jesús sigue revelando su identidad, insiste en varios momentos de este discurso, que es enviado, que no hace nada por su propia cuenta, que está en sintonía con el Padre y que todo lo que dice y hace, es expresión y voluntad del Padre, pero que ellos no le entienden porque no conocen ni al Padre ni a Él.